El sistema auditivo tiende a resentirse con el paso de los años. Y uno de los problemas por los cuales los especialistas del oído atienden más casos son los acúfenos. Un trastorno auditivo que aumenta a partir de los 50 años y afecta por igual a hombres y mujeres.
Según la Clínica Universidad de Navarra, entre el 10% y el 17% de la población mundial sufre acúfenos. Por otra parte, el 85% de las enfermedades del oído se acompañan de acúfenos.
Paralelamente, al menos un 8% de la población mundial sufre de acúfenos y hasta un 30% lo ha padecido en alguna ocasión de su vida, según los últimos datos publicados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
¿Qué son los acúfenos?
Los acúfenos o zumbidos en los oídos son un síntoma frecuente en la población, pues se presenta entre un 10-17%, pero en la mayoría de los casos, no molesta (porque no se produce alteración en su procesamiento central) y no es necesario realizar ningún tratamiento específico.
En sí, los acúfenos, o tinnitus, como también se le conoce, no son un enfermedad sino más bien un signo con el que se manifiesta el sistema auditivo.
Suele ser un sonido como un pitido o zumbido y, por lo general, tienden a ser de tono agudo. En los casos en los que molestan, pueden alterar el sueño y llegar a interferir con la concentración y realización de actividades cotidianas. En la medida en que los acúfenos afectan a la vida cotidiana y no se consigue un descanso adecuado, el paciente se encuentra más irritable y cada vez se afecta en mayor medida su calidad de vida.
Causas de los acúfenos
No existe una única causa que provoque la aparición de este molesto pitido, aunque los especialistas señalan como principal el exponerse a ruidos elevados de forma habitual. No obstante, existen otros factores de riesgo como el estrés, el dolor cervical o las infecciones en el oído.
A pesar de no existir evidencias científicas en torno a las causas exactas que provocan los acúfenos, según el medio de referencia de la Clínica de la Universidad de Navarra, estos son los factores que pueden propiciar la aparición de esta molestia:
- Hipoacusia o pérdida de audición.
- Infecciones de oído.
- Exposición a ruidos fuertes.
- Fármacos ototóxicos: ácido acetilsalicílico, quinina, algunos antibióticos, etc.
- Tapones de cerumen.
- Tumores del nervio acústico.
- Otros causas como problemas en la columna vertebral, disfunción temporomandibular, hipertensión arterial, entre otros.
Tratamiento de los acúfenos
Lo más importante para tratar esta molestia es detectar la causa subyacente.
Los acúfenos se pueden tratar de diversas formas y algunas de las más habituales son:
Realizar un tratamiento en los vasos sanguíneos
Si el acúfeno es objetivo, una de las causas puede estar en los vasos sanguíneos.
En el caso de que se confirme que el problema sea vascular, la persona necesitará ingerir una medicación concreta en los casos leves, o someterse a una cirugía si la situación es grave.
Eliminar el cerumen de los oídos
El cerumen es la sustancia grasa y de color amarillo que segregan las glándulas del conducto auditivo externo. Está presente tanto los niños como los adultos, y la finalidad del cerumen es la de lubricar y limpiar el oído ante cualquier sustancia o materia externa, como las motas de polvo, la arena o los pequeños insectos. Por tanto, el cerumen es beneficioso para el organismo, pero solo en su justa medida, porque cuando existe demasiada cantidad de cerumen se produce un tapón de cera en el canal auditivo.
En ese caso, al margen de escuchar con dificultades porque hay un obstáculo evidente que se entromete, se corre el riesgo de padecer algunas infecciones. Peo si un especialista se encarga de retirarlo, también pueden disminuir los síntomas de un acúfeno.
Recetar lidocaína
Muchos expertos coinciden en que la lidocaína es el único fármaco al que se le puede considerar que acabe con el acúfeno o tinnitus, pero a fecha de hoy, aún no cuenta con el respaldo de los ensayos clínicos suficientes. Por tanto, este medicamento solo se debe usar con prescripción médica y en casos concretos para evitar algún problema.
Cambiar la medicación
Existen medicamentos con efectos secundarios que provocan síntomas negativos. Es decir, que una persona puede tratarse frente a otra patología y terminar padeciendo un tinnitus. Por ejemplo, existen los medicamentos ototóxicos, que son los que dañan el oído. Los antibióticos aminoglucósidos o los citostáticos pueden entrar en esta categoría. Si se da este caso, la solución pasa por que el médico cambie la medicación y que recete una nueva al paciente.
Ejercicios para eliminar acúfenos
En los casos leves de acúfenos existen una serie de ejercicios para calmar los acúfenos, que se reducen en sencillas técnicas que cualquiera puede practicar desde casa. No obstante, se debe consultar al especialista si hacerlo o no y de qué manera.
En primer lugar, se encuentra la técnica del chasquido en la cabeza, que consiste en taponar los oídos con las palmas de las manos y con los dedos índice y corazón llevar a cabo un leve chasquido en la parte trasera de la cabeza. Se recomienda repetir la operación 24 veces.
En segundo lugar, masajear la mandíbula también puede ayudar a aliviar los síntomas molestos de los acúfenos. Para ello, será necesario realizar un masaje con los dedos en la articulación temporomandibular y, posteriormente, traccionar el oído en todas las direcciones.
Asimismo, y siempre con cuidado y, a ser posible, con la supervisión de otra persona, los estiramientos de cuello son otro de los ejercicios que se suelen recomendar a la hora de frenar los signos de tinnitus. Para ello, habrá que flexionar a cada lado y delante y detrás (ayudándose de las manos) y girar la cabeza en ambas direcciones.
La quiropraxia se ha puesto de moda como uno de los masajes más efectivos a la hora de aliviar molestias, también de los oídos. Es un tratamiento manual que incluye el ajuste vertebral y otras manipulaciones articulares y de tejidos blandos, es uno de los masajes más demandados para reducir la presión del tinnitus, Esta técnica sí que es específica de un fisioterapeuta.
¿Los acúfenos desaparecen?
La posibilidad de que los acúfenos desaparezcan depende de la causa subyacente y la situación específica de cada persona. Sí pueden desaparecer los acúfenos sin necesidad de ningún tratamiento. Se trata de un trastorno auditivo reversible. Además, dependerá de la intensidad de estos el hecho de que se puedan curar por sí mismos.
Aunque puedan desaparecen sin necesidad de pasar por tratamiento, es recomendable en cualquier caso acudir a un especialista otorrino para que este profesional determine el alcance y la hoja de ruta a seguir por la persona afectada.
¿Existe cura definitiva para el tinnitus?
En algunos casos, tal y como se ha comentado, la presencia de acúfenos se curan sin necesidad de tratamiento, es lo que se conoce como acúfenos temporales. Sin embargo, han aparecido con el paso de los años una serie de remedios naturales, fármacos o terapias que, lejos curar el tinnitus, lo que hacen es mitigar los síntomas y no la curación total del problema. De hecho, existen evidencias científicas que relacionan la presencia de acúfenos con la depresión.
Remedios naturales para los acúfenos
A continuación, se enumeran algunos de los remedios naturales más populares a la hora de tratar el tinnitus:
- Terapia de grupo para aliviar los pitidos en los oídos, con la ayuda de un psicólogo experto.
- Osteopatía para relajar la musculatura, sobre todo de la zona cervical, y para mejorar la circulación sanguínea por todo el cuerpo.
- Yoga o relajación para calmar la ansiedad y el estrés producidos por los acúfenos.
- Seguir una dieta sana y equilibrada, acompañada de ejercicio regular.
- Ruido blanco para enmascarar el sonido constante que produce el acúfeno.
Es fundamental detectar los signos de los acúfenos a tiempo para poder ponerse en manos de un especialista. Se trata de una de las dolencias más comunes en la tercera edad, en lo que al sistema auditivo se refiere. Además, puede llegar a afectar negativamente a la calidad de vida de la persona que los sufre.
Por último, se recomienda llevar un estilo de vida saludable, controlar la salud cardiovascular, limitar el consumo de alcohol, cafeína y nicotina, además de no exponerse durante un largo periodo a música amplificada o que exceda de los límites permitidos.
