El Síndrome de Ménière es una enfermedad del oído interno que afecta el equilibrio y la audición. La padecen miles de personas en todo el mundo y puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de quienes lo sufren. En este artículo, exploraremos en profundidad cuáles son los síntomas, causas, diagnóstico y tratamientos posibles.
¿Qué es exactamente el Síndrome de Ménière?
El Síndrome de Ménière es una afección del oído interno que afecta la audición y el equilibrio. Se caracteriza por una combinación de síntomas que incluyen vértigo, pérdida de audición, tinnitus (zumbido en el oído) y la sensación de plenitud en el oído afectado. Esta condición se cree que se debe a un exceso de líquido en el oído interno, lo que puede provocar problemas en el equilibrio y la audición, no obstante, los científicos no están seguros de esto.
¿Cómo saber si los vértigos provienen del oído?
Los síntomas de vértigo se manifiestan como episodios intensos de mareo, que a menudo van acompañados de náuseas y vómitos.
Para determinar si los vértigos provienen del oído, es importante buscar la evaluación de un profesional de la salud. Las siguientes son algunas señales que pueden indicar que los vértigos tienen origen en el oído:
- Vértigo rotatorio: el vértigo asociado con problemas del oído a menudo se experimenta como una sensación de giro o movimiento rotatorio. Los afectados pueden sentir que ellos o su entorno están dando vueltas.
- Cambios en la audición: la pérdida de audición o la sensación de plenitud en el oído pueden acompañar al vértigo si está relacionado con el oído interno.
- Síntomas de otoconia: en algunos casos, los vértigos pueden estar relacionados con el desplazamiento de partículas llamadas otoconias, en el oído interno. Esto puede causar vértigo posicional, que se desencadena por cambios en la posición de la cabeza.
- Antecedentes de problemas de oído: si se tienen antecedentes de problemas en el oído, como infecciones crónicas, es más probable que los vértigos estén relacionados con el oído.
Síntomas frecuentes de la enfermedad de Ménière
Son varios los síntomas que nos podrían indicar que una persona padece del Síndrome de Ménière. Los más frecuentes son los siguientes:
Mareos y vértigos
Uno de los síntomas más distintivos de la enfermedad de Ménière es el mareo y el vértigo. Los episodios repentinos de vértigo pueden durar desde minutos hasta horas y provocan una sensación de giro intenso, dificultando la capacidad de la persona de tenerse en pie. Esto es especialmente delicado en el caso de los ancianos, ya que este mareo podría ser el causante de pérdidas de equilibrio y caídas.
Las enfermedades que alteran el equilibrio perjudican gravemente la salud de los ancianos, para los que ya de por sí resulta más complicado mantener la estabilidad al tenerse de pie o caminar.
Pérdida de audición
Este síntoma puede ser intermitente al principio pero, con el tiempo, puede volverse permanente. Cuando esto sucede, es importante que la persona afectada comience a utilizar audífonos para personas mayores, los cuales permiten mejorar considerablemente su capacidad de oír, evitando de este modo su aislamiento e incluso el desarrollo de enfermedades cognitivas.
Zumbidos en los oídos
«Me duele el oído y me dan punzadas». Esta frase que a veces nos dicen los mayores podría indicar que el anciano está desarrollando síntomas del Síndrome de Ménière. El tinnitus se manifiesta como zumbidos o pitidos en los oídos, lo que puede ser molesto y perturbador para el mayor. Algunas personas también reportan sensación de agua en el oído, o de taponamiento.
¿Cómo empieza el Síndrome de Ménière?
La enfermedad de Ménière generalmente comienza de manera gradual y puede evolucionar con el tiempo. Aunque no todos los casos son iguales, a menudo siguen un patrón característico:
- Episodios aislados: este trastorno a menudo comienza con episodios aislados de síntomas como vértigo, pérdida de audición temporal, tinnitus y una sensación de plenitud en el oído. Estos episodios pueden variar en duración y gravedad.
- Aumento de la frecuencia: con el tiempo, es posible que los episodios se vuelvan más frecuentes y más intensos. Los pacientes pueden notar que los síntomas aparecen y desaparecen en oleadas.
- Pérdida de audición progresiva: la pérdida de audición suele ser gradual y puede afectar principalmente a un oído.
- Tinnitus Persistente: el zumbido en el oído puede volverse más persistente a medida que progresa la enfermedad.
Ante la sospecha de sufrir el Síndrome de Ménière, es esencial buscar la evaluación de un profesional de la salud, como pueda ser un otorrinonaringólogo. Un diagnóstico temprano y un plan de tratamiento adecuado pueden ayudar a controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida del paciente.
¿Cuál es el tratamiento para el Síndrome de Ménière?
El tratamiento de la enfermedad de Ménière se centra en controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida de quienes lo padecen. Los enfoques de tratamiento pueden variar según la gravedad de la afección y la respuesta individual del afectado. Algunas opciones son las siguientes:
Cambios en la dieta
Limitar la cantidad de sal en la dieta puede ayudar a reducir la retención de líquidos en el oído interno, lo que puede disminuir los síntomas.
Ingesta de medicamentos específicos
Los diuréticos pueden ayudar a reducir la acumulación de líquido en el oído interno, y los medicamentos antieméticos se utilizan para controlar las náuseas y los vómitos durante los episodios de vértigo.
Terapia de rehabilitación vestibular
La terapia de rehabilitación vestibular es un enfoque de tratamiento centrado en mejorar el equilibrio y reducir la sensación de vértigo. Los ejercicios específicos pueden ser útiles porque ayudan a entrenar al cerebro a compensar los desequilibrios.
Cabe especificar que no existe a día de hoy una cura como tal para esta enfermedad. El tratamiento está enfocado en paliar los síntomas y mejorar la calidad de vida de las personas afectadas. En casos severos podría ser conveniente incluso recurrir a la cirugía.